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ThermTec Hunt 335 Pro es un clip-on térmico compacto de alta calidad, ideal para acoplar a tu visor sin perder el cero. Con sensor de 384x288 píxeles, NETD ≤15 mK y lente de 35 mm, ofrece detección hasta 1.800 m. Montaje rápido, batería reemplazable y diseño robusto en magnesio con protección IP67. Precisión, facilidad de uso y autonomía para jornadas exigentes.
Cuando uno busca una herramienta térmica que combine versatilidad, precisión y ligereza, es inevitable toparse con el ThermTec Hunt 335 Pro. Este dispositivo no es solo una pieza tecnológica más en el mercado de la visión térmica; es una solución real y confiable para quienes necesitan rendimiento constante, especialmente en entornos de baja visibilidad.
Lo que más me sorprendió desde el primer momento fue su facilidad de uso. Es un clip-on térmico de gran calidad que se instala en segundos directamente sobre el visor diurno, sin necesidad de ajustes complicados ni herramientas adicionales. No soy especialmente técnico, pero el sistema de acoplamiento está diseñado de forma tan intuitiva que prácticamente cualquiera puede hacerlo.
Antes de entrar en detalles técnicos, es importante entender por qué un clip-on térmico como el Hunt 335 Pro puede ser una mejor elección frente a una mira térmica dedicada.
Un clip-on se coloca directamente sobre el visor que ya utilizas, lo que implica:
No necesitas hacer un nuevo cero cada vez que lo montas.
Aprovechas el retículo y configuración de tu visor actual.
Puedes quitarlo y ponerlo sin perder el punto de impacto, algo que en mi caso he comprobado personalmente: "Es pequeño y no se va de tiro aunque lo montes y lo quites varias veces."
Además, al no comprometer la funcionalidad diurna de tu visor, te permite mantener un setup flexible, perfecto para jornadas de caza que comienzan con luz y se extienden hasta entrada la noche.
Cuando hablamos de tecnología, el Hunt 335 Pro no decepciona. Cuenta con un sensor térmico de 12 μm con una sensibilidad de NETD ≤15 mK, lo cual es crucial para captar mínimas diferencias térmicas, incluso en condiciones de niebla o lluvia ligera.
Resolución del sensor: 384x288 píxeles
Tamaño del píxel: 12 μm
Lente objetiva: 35 mm F1.0
Distancia de detección: Hasta 1.800 m
Frecuencia de actualización: 50 Hz (fluidez asegurada)
Este nivel de detalle y alcance convierte al Hunt 335 Pro en una herramienta altamente eficaz para detectar objetivos, tanto en caza como en vigilancia o control de fauna.
Además, su sistema sin obturador interno reduce las interrupciones visuales, gracias a una calibración continua mediante inteligencia artificial. La imagen permanece estable y nítida en todo momento, sin esos molestos parpadeos que a veces aparecen en otros dispositivos térmicos.
Una de las cosas que más valoro en equipos de campo es la resistencia combinada con ligereza. El cuerpo del Hunt 335 Pro está fabricado con aleación de magnesio, lo que le da una estructura robusta sin penalizar en peso.
Con un diseño compacto y ergonómico, se siente muy equilibrado cuando lo colocas en el visor. Y como mencioné antes, "Es pequeño y no se va de tiro aunque lo montes y lo quites varias veces." Esa compacidad es vital cuando se necesita movilidad, ya sea entre puestos o durante la aproximación a pie.
La protección IP67 asegura que resista polvo, lluvia intensa, e incluso caídas accidentales al barro. No es solo un dato técnico, es una tranquilidad real cuando estás en el monte y las condiciones se ponen duras.
Aquí viene uno de los puntos fuertes que realmente marcan la diferencia: la batería es externa y reemplazable. Esto significa que no dependes de una batería interna limitada ni de enchufes para recargarla.
"Tiene batería separable, lo que le da mucha versatilidad al poder llevar baterías de recambio." Y es cierto. He podido llevar varias baterías cargadas y cambiarlas en segundos, incluso con guantes, gracias a su diseño de montaje rápido y seguro.
Cada batería ofrece entre 6 y 7 horas de autonomía, dependiendo del uso de funciones como grabación de video, Wi-Fi, o zoom digital. En una jornada completa, esto me ha permitido trabajar sin interrupciones, algo que con otros térmicos no siempre es posible.
"Entre sus ventajas se encuentra la facilidad de instalación, se coloca en el visor de forma muy sencilla."
No exagero al decir que este es uno de los dispositivos más sencillos de montar que he probado. Su sistema de acople tipo bayoneta con ajuste fino permite alinearlo en segundos, sin necesidad de recalibrar el visor.
Y lo más importante: mantiene el cero perfectamente. Puedes desmontarlo y volver a montarlo sin que varíe el punto de impacto. Lo he probado en distintas condiciones, incluso con cambios de temperatura, y la precisión sigue siendo la misma. Esto lo convierte en un clip‑on confiable incluso para tiradores exigentes.
Uno de los grandes avances del Hunt 335 Pro es la tecnología de calibración sin obturador, que utiliza algoritmos de inteligencia artificial para mantener la imagen siempre clara, sin los clásicos "clics" o interrupciones visuales.
Este sistema permite:
Visión continua sin parpadeos
Mejor seguimiento de objetivos en movimiento
Menor distracción en plena acción
Además, cuenta con mejoras de contraste dinámico y ajuste automático de ganancia, lo que se traduce en una experiencia visual mucho más cómoda y eficaz. Incluso en zonas boscosas densas o campos abiertos con contraste térmico bajo, el detalle que ofrece este dispositivo es impresionante.
Dentro de la gama ThermTec Hunt Pro, encontramos también los modelos 635 Pro y 650 Pro. La principal diferencia entre ellos radica en el tamaño de la lente y el alcance de detección.
Hunt 335 Pro: lente de 35 mm, detección hasta 1.800 m
Hunt 635 Pro: lente de 35 mm con sensor de mayor resolución (640x512)
Hunt 650 Pro: lente de 50 mm, mayor distancia, ideal para campo abierto
Si necesitas mayor resolución o alcance, puedes optar por el 635 o el 650. Pero para la mayoría de los usos (caza mixta, aguardos, esperas, recechos), el 335 Pro ofrece un equilibrio excelente entre prestaciones, peso y precio.
Comparado con otras marcas, el Hunt 335 Pro destaca por su relación calidad-precio y por detalles clave como la batería intercambiable y el montaje sencillo, que muchas veces se pasan por alto en la ficha técnica pero que marcan la diferencia en el terreno.
En mi experiencia personal, el Hunt 335 Pro ha sido el compañero ideal para sesiones de caza nocturna. Su capacidad de detección permite identificar presencia animal a distancias considerables, y con el zoom digital x2/x4 puedes inspeccionar sin moverte del puesto.
En jornadas largas donde el tiempo cambia y la visibilidad se reduce, he agradecido enormemente su calibración automática, su imagen fluida y, sobre todo, la posibilidad de cambiar batería en cuestión de segundos.
También lo he utilizado para vigilancia de fincas y perímetros rurales, donde se ha comportado con precisión milimétrica. En una ocasión, detecté un zorro a más de 500 metros en plena madrugada, con una nitidez sorprendente para el tamaño del dispositivo.
Tras semanas de uso intensivo, puedo decir que el ThermTec Hunt 335 Pro es un clip-on térmico fiable, compacto y extremadamente práctico. Cumple con creces en los puntos clave para cualquier usuario exigente: imagen, instalación, autonomía y resistencia.
Ventajas destacadas:
Montaje en visor extremadamente fácil
Imagen térmica muy detallada y fluida
Batería intercambiable ideal para largas jornadas
No pierde el cero tras múltiples montajes
Robusto, ligero y bien equilibrado
Aspectos a considerar:
Resolución menor que el modelo 635 Pro
Sin telémetro integrado (aunque no lo echo en falta)
Precio algo elevado, pero justificado por sus características
En resumen, si buscas un clip-on térmico de gama alta que no te complique la vida, que te permita trabajar con confianza, y que se adapte a tus rutinas sin sacrificar precisión, el Hunt 335 Pro es una apuesta segura.
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